Si te sientes reconocido en estas frases, es posible que tengas una baja autoestima o la hayas detectado en tu hijo adolescente.
La autoestima es el conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamientos dirigidos hacia uno mismo, hacia nuestra manera de ser y hacia las características de nuestro cuerpo. Por otro lado, la baja autoestima haría referencia a la percepción negativa que una persona tiene sobre sí misma, lo que puede afectar su bienestar emocional y su autoconfianza.
La baja autoestima suele manifestarse como falta de confianza en uno mismo, tendencia a compararse constantemente con los demás, dificultad para aceptar cumplidos y autocrítica excesiva. Los adolescentes con una autoestima baja pueden ser más influenciables, buscar constantemente la aprobación de los demás y tender hacia el aislamiento.
La autoestima juega un papel fundamental en la salud mental de una persona, por lo que tener una baja autoestima puede llevar a la persona a padecer problemas de ansiedad, depresión, trastornos alimenticios y dificultades en las relaciones interpersonales, entre otras dificultades. Es especialmente importante durante la adolescencia, ya que es un momento de cambio y de aprendizaje sobre uno mismo.
Si crees que estas dificultades están presentes en tu vida o en la de tu hijo adolescente, pero sobre todo, si tu situación te causa mucho malestar o está afectando a su vida diaria, es un buen momento para acudir a un psicólogo.
En psicologíaTR3S, nos encargaremos de evaluar la situación, os ayudaremos a encontrar una explicación a lo que está pasando y os propondremos una serie de herramientas que poner en práctica para volver a encontrarte bien y recuperar tu vida.